Mostrarme como una persona vulnerable nunca ha sido lo mío.
Siempre pensé que lo más conveniente era ocultar mis “defectos” y aparentar ser fuerte en todo momento y en cualquier circunstancia.
Porque de lo contrario, me vería como una persona débil y, por lo tanto, la gente se aprovecharía de mí y me lastimaría o no les agradaría.
Con el tiempo me di cuenta que esta creencia iba acompañada de mi constante esfuerzo por hacer todo a la perfección y, como consecuencia, a mi deseo de sentirme aceptada y querida.
En el campo laboral y profesional estaba convencida de que para generar confianza, credibilidad y buenos resultados, debía mantener una imagen de excelencia y de competencia absoluta.
No me daba permiso para equivocarme.
La mentira que nos contamos
En el mundo de las redes sociales predominan las apariencias y es difícil identificar cuando alguien es fiel a su esencia o cuando está tratando de mostrarse como alguien que no es.
Facebook e Instagram estás llenas de publicaciones motivacionales para alcanzar el éxito en los negocios o para ser “la mejor versión de uno mismo”.
Y LinkedIn ni se diga. Están los que aparentan ser triunfadores y los que dicen a los 4 vientos ser el CEO de una startup (va uno a ver y el tal CEO trabaja más solo que un hongo desde el sótano de la casa de sus padres).
Palabras que sirven solamente para alimentar el ego. No dicen nada. Puro relleno.
Muéstrame cuántos contactos, seguidores y likes tienes y te diré qué tan exitoso eres.
Pero, ¿qué tan auténtica es esta forma de presentarse ante una comunidad?
Para crear y comunicar con autenticidad se necesitan coj*nes (o bueno, ovarios)
Cuando decides trabajar bajo tu marca personal en la arena digital, debes empezar por aceptar que serás susceptible a la crítica y al escrutinio.
Y si buscas relaciones auténticas y genuinas con la gente, también es cierto que necesitarás mostrarte así, de manera auténtica y genuina.
Parte importante de este proceso consiste en aceptar tus imperfecciones.
Y sí, es de valientes exponerse frente a los demás (generalmente desconocidos) y mostrar que no todo es diversión y felicidad en nuestra vida y negocio.
Por ejemplo, reconocer cuando metes la pata con un cliente, cuando en tu lanzamiento no vendiste nada, cuando nadie asistió a tu webinar, cuando tu blog no lo visita ni tu madre.
Mostrarse honestamente vulnerable es más beneficioso para una marca personal que pretender llevar un negocio y una vida perfecta.
Además, es menos aburrido.
¿Por qué?
Porque es un acto liberador.
Porque implica vivir sin tener que ofrecer disculpas a nadie por ser quien eres y aceptarte en todas tus expresiones posibles.
Y porque construyes nuevas formas de conectar con tus lectores.
Como marca personal quieres crear conexiones significativas y lo que más resuena con la gente real es una marca personal real con la que se puedan identificar.
Sin embargo, no todo el mundo está dispuesto a ser o a mostrarse como alguien vulnerable.
Por eso es que vemos a muchos profesionales, emprendedores e “influenciadores” con la inútil intención de servir de modelos de vida presumiendo de sus cifras, de sus 100.000 seguidores y likes, con sus fotos en la piscina y en la playa haciendo que trabajan.
Pero, ¿realmente influencian e inspiran de esa manera?
Mostrar tus vulnerabilidades no te hace menos profesional
Al mostrarte vulnerable pones a un lado tus miedos a equivocarte o a no saberlo todo, para presentarte con la confianza suficiente para hacer que otros escuchen lo que tienes que decir y ofrecer.
Por ejemplo, hace poco un cliente me pidió un presupuesto para realizar un trabajo del cual no tenía mucha experiencia que digamos.
Pude haberle dicho que sabía hacerlo al dedillo y mentir para que me contratara.
Sin embargo, decidí ser sincera e informarle que no tenía mucho conocimiento sobre el tema pero, que si decidía contratarme, me iba a dedicar al máximo.
El cliente me agradeció por mi sinceridad y terminó contratándome por ello.
Un aspecto clave de ser vulnerable implica admitir que no nos la sabemos todas y que necesitamos y vamos a necesitar de la ayuda de otros para lograr nuestros objetivos.
Nuestras imperfecciones nos hacen más atractivos
Que lance la primera piedra quien no se haya equivocado o fracasado alguna vez en su vida.
Es altamente probable que tu servicio y el mío hayan decepcionado a alguien en algún momento por no cumplir con las expectativas del cliente.
Como clientes también hemos pasado por la experiencia de comprar un servicio que resultó ser muy diferente a lo que esperábamos recibir.
Las personas que no admiten sus equivocaciones suelen culpar a otros y nunca admitir sus errores.
Lo que causa un efecto negativo en el cliente, que no es tonto y puede llegar a intuir que algo no está del todo bien. No sabe qué, pero desconfía.
De eso tan bueno no dan tanto.
Las marcas vulnerables no solamente admiten que son responsables de las metidas de pata.
Admiten que se equivocaron, que fracasaron y buscan la forma de mejorar y seguir adelante.
Hablar sobre tu servicio como si fuera lo mejor del mundo mundial es mentir y por lo tanto, despierta suspicacias y sospechas.
Una marca personal vulnerable conserva una comunicación honesta con sus clientes y con sus lectores.
Ser vulnerable es sexy
¿Por qué no nos gusta mostrarnos como personas vulnerables?
Sencillo. Porque tenemos miedo de parecer débiles, de perder clientes, de perder credibilidad.
Aquí te presento algunas ideas para mostrar vulnerabilidad cuando trabajas tu marca personal
✔️ Ofrece disculpas cuando la embarras.
✔️ Admite que no te la sabes todas, incluso si eres un experto.
✔️ Pide la ayuda cuando la necesites.
✔️ Sé transparente acerca de cómo es realmente tu negocio.
✔️ Cuenta tu porqué.
✔️ Acepta tus emociones negativas (vergüenza, asco, miedo)
✔️ Comparte tus valores y vive una vida alineada con ellos.
✔️ Pide retroalimentación y acepta la crítica.
✔️ No te tomes tan en serio.
Escribe y crea como si no hubiera un mañana
La mayoría de nosotros nos reprimimos un poco cuando escribimos. Y es algo natural que viene del miedo al rechazo o al ridículo.
Nos persigue el maldito “qué dirán”.
Pero el verdadero contenido con potencial para generar emociones debe conectar a un nivel personal, y esto ocurre cuando compartes historias y experiencias.
Esto no quiere decir que ahora te vas a dedicar a ventilar tu vida privada, tus más profundos y oscuros secretos o a escupir sin ton ni son todos tus problemas y dificultades en la vida.
No hay que exagerar.
Así construimos empatía.
Por eso, baja la guardia de vez en cuando. Eso no te hará menos profesional, pero sí más humano.
Los lectores quieren sentirse identificados contigo y tener algún nivel de intimidad en la relación que establezcas con ellos.
Conócete antes de conocer a tus clientes
Pregúntate: ¿qué partes de mí oculto y por qué?
Comienza un diálogo contigo mismo y define qué quieres compartir y cuál es el valor de compartirlo con otros.
No uses la vulnerabilidad como una “herramienta” que “debes” utilizar para gustar más.
[Ay, entonces como lo cool es ser vulnerable para mejorar la marca personal, voy a empezar a publicar mis cagadas y a hablar de mi vida personal]
De ser así, estaríamos alterando todo el sentido.
Permite que las historias fluyan de manera natural, en el momento preciso y en dosis adecuadas.
Es importante que te sientas cómodo al hacerlo. Ya hay demasiado postureo en Internet como para incluir más.
Conclusión
? No corras detrás de una marca personal perfecta.
? Construye una marca personal que sea humana y date permiso de admitir y apropiarte de tus fallas.
? Las personas hacen negocios con quienes conocen y en quienes confían. Y eso es posible cuando muestras tu verdadero yo.
? Para que tu marca personal sea eso PERSONAL, debe reflejarte a ti con tus aciertos y tus fracasos, con tus triunfos y tus frustraciones.
? Escucha esta charla TED con Brené Brown, una experta en el tema que se dedica a investigar sobre la vulnerabilidad.
Thania me ha gustado mucho este post, de hecho decreté en mis redes sociales que febrero sería mes de la vulnerabilidad, y es que he estado investigando sobre el tema y me doy cuenta cómo lo he ido aplicando a mis temáticas y me parece esencial que sea la transparencia parte de lo que queremos ofrecer a nuestros lectores y posibles clientes, me parece un tema esencial y me encanta que lo abordes en tu blog, porque no se trata solamente de poner en bandeja nuestra intimidad, sino de ser empáticos y auténticos con quienes se acercan a nuestros proyectos. Saludos.
Hola Eliana.
Es importantísimo aceptar nuestra vulnerabilidad para poder comunicar de manera auténtica y lograr gustarle a la gente. Pero como tú dices, no desde el falso postureo (que mucho se ve por ahí) sino desde la honestidad. Nuestros lectores lo notarán.
Una temática poco habitual para hablar de marca personal, pero muy necesaria. Excelente post.
Creo que como todo si tienes una marca personal, tienes que ser auténtico y tal como eres. Es como una relación de pareja, queriendo ser siempre perfecto, no se mantiene en el tiempo.
Pero también te digo, que hay mucha vulnerabilidad fingida que también se nota a la legua.
Seamos honestos y transparentes. Porque solo así atraeremos a un público que se sienta identificado y tenga feeling con nosotros. Yo no trabajo con profesionales o marcas con las que no conecto…
Gracias por la reflexión. Saludos
Hola Mónica.
En la autenticidad está la clave. Y reconocer que no somos perfectos en todo nos ayudará a sentirnos mejor con nosotros mismos y con nuestros lectores. Y sí, coincido contigo en que hay mucha vulnerabilidad fingida, yo la noto inmediatamente y pierdo la confianza en el personaje para siempre.
Uff yo tengo que guardarme este post para leerlo y releerlo porque la verdad eso de la vulnerabilidad en la marca personal sigue causando en mi cierto desconcierto.
Entiendo lo importante que es mostrarse tal cual uno es, pero el tema de ser vulnerable sigue sin dejarme del todo tranquila. No sé, quizás porque a veces siento que no tengo nada vulnerable y otras porque me siento demasiado vulnerable y no quiero que me perciban así. No sé. Mucho para pensar, reflexionar y decidir, pero desde luego el ser uno mismo debe de ir de la mano con esto de la vulnerabilidad y con el ser…
Gracias por esta reflexión, que seguirá unos días más 🙂
Hola Diana.
¿Qué parte no te deja tranquila? ¿Por qué no quieres que te perciban así?
Igual, hay que hacer el ejercicio a ver cómo te sientes. Tampoco se trata de imponer nada.
Yo sí es que conecto más con la gente que se muestra tal y como es.
Excelente post y como me alegro que en el mundo online exista personas tan autenticas como tú. Nadie quiere hablar de sus errores en las redes sociales, todos son perfectos y exitosos, tienen formulas mágicas para ayudarte a conseguir lo que ellos supuesta mente tienen. Me encanta tu reflexión porque fue algo que hice cuando aprendí a no ir detrás de una marca perfecta. Quiero ser yo en todo tiempo y eso es lo mejor que se puede transmitir en las redes.
Hola Alexandra.
Gracias por las flores.
Sí, nada más echarte una pasadita por cualquier red social para darse cuenta de la cantidad de mentiras que nos quieren meter.
Yo tampoco quiero ir detrás de una marca personal perfecta.
Y si a alguien no le gusta eso, pues SORRY.
Escogí este trabajo y esta forma de trabajar precisamente para ser realmente YO.
🙂
Interesante post. No me lo había planteado desde esta perspectiva. La vulnerabilidad siempre la había trabajado desde un entorno más personal e incluso profesional aunque no desde la marca personal. Voy a hacer un ejercicio de introspección. Gracias y un abrazo
Hola Adriana.
Genial que mi post te haya llevado a animarte a hacer un ejercicio de introspección.
Todo se trata de tener un tono y una voz fiel a nosotras mismas.
Thania, te felicito por este post!
Ser emprendedora es la mejor terapia de autoconocimiento que he tenido, he descubierto todos mis miedos y esa necesidad de agradar y verme perfecta, por fin saqué eso a la luz de la consciencia y me estoy permitiendo ser, cometer errores y volver a ser en una mejor versión.
Espero que tu mensaje llegue a todos los nuevos emprendedores, que no se desgasten en el camino corriendo detrás de una marca perfecta… apariencias que hoy ya todos sabemos que no son reales!
De hecho creo que conecto de una forma mucho más auténtica con mis lectoras cuando me muestro vulnerables, cuando les muestro que también vivo sus dramas, pero los enfrento y trabajo sobre ellos… Claro, también contando intimidades hay que hacerlo desde equilibrio, pero de que conecta, conecta.
Gracias Thania!
Hola Rossana.
Pues igual yo. Hasta ahora me estoy dando ciertos permisos para cometer errores y aprender en el camino.
Las apariencias se caen tarde o temprano y tenerlas es reflejo de que no nos gustamos a nosotros mismos.
Mejor “fuera máscaras”.
Hola Thania!
Me gusta mucho leerte siempre, pero en este caso me siento especialmente identificada.
Es que nos tocó vivir en una época con mucha exposición y a la vez con mucha necesidad por nuestros negocios de “gustar”.
Trato siempre de ser transparente y no vender ilusiones, pero a la vez creo que las personas a veces nos buscan para la parte linda de la vida. Entonces el equilibrio se torna un poco difícil de conseguir.
Por otra parte, oh las temidas críticas. El ego, ese enemigo terrible se nutre y sale a defenderse cuando nos dicen algo que no nos gusta.
De todas maneras, es un tema pendiente en el cual estoy trabajando profundamente. Tengo clarísimo que no tengo por qué gustarle a todo el mundo. Pero cuánto más fácil es recibir palabras lindas que críticas.
Como te digo, es un tema a trabajar. Logré vivir sin máscaras, pero ahora tengo que conseguir sentirme más libre para escribir todo lo que pienso, sin preocuparme tanto del qué dirán.
Abrazo!
Hey Florencia.
Te entiendo perfectamente. Yo también estoy en ese proceso, en aceptarme tal como soy y gustarme, para poder gustarle a los demás. No a todos, simplemente a quienes sintonicen conmigo.
Un abrazo.
Estoy convencida que para mostrarse vulnerable hay que ser muy valiente, porque mostrando tus puntos débiles y tus errores te expones a las criticas. Pero también pienso que es la única forma de vivir en paz y ser auténtica, además de ser la mejor manera de acercarte a tus clientes o amigos y conseguir su confianza.
Y esto para mi se aplica a la vida y a laarca personal.
Eso que dices es verdad. Es un riesgo que se toma y a la vez, es la forma en la que nos sentimos tranquilas con nosotras mismas. Se aplica en la vida y en el trabajo, totalmente. Afortunadamente nosotras decidimos por oficios que nos permiten ser quienes somos realmente.